LOS CINCO ELEMENTOS

 

 

La teoría de los cinco elementos.

 

Otra forma de equilibrar el Chi.

 

Los cinco elementos son: madera, fuego, tierra, metal y agua.

 

Son considerados la base de todo lo material que existe en el planeta incluido el ser humano. Estos elementos se relacionan con formas, colores, plantas, personalidad... Y la teoría de los cinco elementos en el FengShui consiste en equilibrar la energía de nuestro entorno con el correcto uso de estos cinco elementos.

 

Se trata de definir y establecer las carencias o excesos de estos elementos en nuestro entorno para conseguir un perfecto equilibrio tanto en el entorno como en nosotros mismos.

 

Estos elementos forman distintos tipos de ciclos que son la esencia de la naturaleza:

 

Ciclo de Generación

 

agua > madera > fuego > tierra > metal

 

El agua alimenta a la madera

La madera genera el fuego

El fuego genera a la tierra

La tierra da vida al metal

El metal da vida al agua

 

Ciclo de Control

 

El ciclo de control y conquista representa los elementos que puden ofrecer un recurso para disminuir el exceso y el predominio de otro elemento.

 

agua > fuego > metal > madera > tierra

 

El agua controla el fuego

El fuego controla el metal

El metal controla la madera

La madera controla la tierra

La tierra controla el agua

 

Ciclo Destructivo

 

El ciclo destructivo habla de la parte que acaba y destruye el crecimiento y desarrollo de la naturaleza.

 

Este ciclo representa el punto extremo del exceso de control. Si se abusa de un elemento terminará anulando o destruyendo otros elementos.

 

agua > fuego > metal > madera > tierra

 

El agua apaga el fuego

El fuego funde el metal

El metal corta la madera

La madera agota la tierra

La tierra absorbe el agua

 

Cabe recalcar que esto significa que el elemento beneficado destruye la influencia del elemento que amplifica. Por ejemplo: si en un ambiente perteneciente principalmente al elemento Tierra se coloca un objeto del elemento Metal, la influencia de la tierra disminuirá...

 

Los elementos se combinan y se complementan armonizandose entre sí.

 

Una vez más llegamos a la búsqueda del equilibrio que es la esencia del FengShui.

 

Poco a poco iremos viendo como conocer y emplear estos cinco elementos para armonizar según cada persona su entorno.

 

La combinanción de los cinco elementos generan importantes "curas" en nuestro entorno y en nosotros mismos.

 

 




 


FUENTES: - “Magia Terrenal”, de Scott Cunningham -

LOS ELEMENTOS DE LA MAGIA

Los «elementos» dentro del simbolismo mágico son los componentes básicos de todo lo que existe. Estos cuatro elementos -Tierra, Aire, Agua y Fuego- son al mismo tiempo visibles a invisibles, físicos y espirituales. Según el pensamiento mágico, todas las cosas han sido formadas a partir de estos cuatro elementos. Nuestro conocimiento científico actual que afirma que hay muchos más «bloques constructivos», está en desacuerdo con esta afirmación, pero no es más que una versión más refinada. Resulta necio ver los cuatro elementos en términos puramente físicos. La Tierra, por ejemplo, no sólo se refiere al planeta en el que existimos, sino también al fenómeno de la terrosidad, de apoyo y estabilidad. Similarmente, el Fuego es mucho más que la llama. Aunque hay muchos atributos de estos elementos que están fuera de lugar en este capítulo, son necesarias unas palabras sobre cada uno de ellos y por qué son importantes en las tareas de magia. Puesto que esta es la magia de la Naturaleza, al usar poderes, instrumentos y símbolos naturales, es importante comprender estos poderes. Uno de los caminos por los que se puede conseguir esto es a través del estudio de los elementos. El sistema de elementos fue ideado y refinado en el Renacimiento, pero sus raíces se extienden mucho más atrás en la historia. Se puede ver como nada más que un sistema de poderes que pueden ser invocados para ayudar en los hechizos y rituales. Cómo lo veas tú es cuestión tuya. Las siguientes discusiones tratan del simbolismo y de los tipos de magia relacionados con los elementos. Toda la magia contenida en este libro está bajo el gobierno de uno (o más) de estos elementos. Esto es verdad también para todo lo que existe. La comprensión de ellos ayudará inmensamente a tus tareas mágicas. Aunque los elementos están descritos como « masculinos o «femeninos», esto no se debe ver de un modo sexista. Esto, como todos los sistemas mágicos, es simbólico -describe los atributos básicos de los elementos en términos fácilmente comprensibles-. No quiere decir que sea más masculina el realizar magia del fuego, o más apropiado para mujeres el usar magia del agua. Es simplemente un sistema de símbolos.



TIERRA (MADRE)

 

Este es el elemento con el que estamosmás cercanos al hogar, puesto que es nuestro hogar. La Tierra no representa necesariamente la Tierra física, sino esa parte de ella que es estable, sólida, segura. La Tierra es el fundamento de los elementos, la base. Es en este dominio en el que vivimos la mayoría de nosotros una buena parte de nuestras vidas. Cuando andamos, nos sentamos, nos levantamos, nos arrastramos, comemos, dormimos, hacemos nuestros trabajos, cuidamos nuestras plantas, examinamos nuestros libros de cheques o probamos sal estamos trabajando con el elemento Tierra. La Tierra es el reino de la abundancia, prosperidad y riqueza. Aunque es el elemento más físico esto no es negativo, porque los otros tres se apoyan sobre la Tierra. Sin la Tierra, la ida como la conocemos no existiría. En las tareas mágicas, la Tierra «regula» todos los hechizos y rituales que involucran negocios, dinero, empleo, prosperidad en todas sus formas, estabilidad, fertilidad, etcétera. Un ritual de este elemento podría ser enterrar un objeto representativo de tu necesidad en una parcela virgen de tierra, caminar a través de millas de campo visualizando tu necesidad, o dibujar imágenes en el barro. La Tierra es un elemento femenino. Es nutridora, húmeda, fructífera y son estas cualidades las que la hacen femenina. Tales atributos han impulsado a incontables civilizaciones a considerar la Tierra como una gran Diosa Madre, la toda-fértil Creadora de la Naturaleza. La Tierra regula el punto Norte de la brújula, porque es el lugar de mayor oscuridad y del invierno. Su color es el verde de los campos y las plantas. Gobierna la magia de las piedras, las imágenes, los árboles y los nudos.



AIRE (HERMANO)

 

El Aire es el elemento intelecto; es el reino del pensamiento, que es el primer paso hacia la creación. En relación con la magia, el aire es la visualización clara, ordenada, pura que es un poderoso instrumento para el cambio. También es movimiento, el ímpetu que envía la visualización hacia afuera, hacia la manifestación. Regula hechizos y rituales que involucran viaje, instrucción, libertad, obtención de conocimiento, descubrir objetos perdidos, desvelar mentiras, etcétera. También se puede usar para desarrollar las facultades psíquicas. Los hechizos que involucran al aire suelen incluir el acto de situar un objeto en el aire o dejar caer algo desde el borde de una montaña o de otro lugar elevado de manera que el objeto conecte físicamente con el elemento. El Aire es un elemento masculino, seco, expansivo y activo. Es el elemento que sobresale en los lugares de aprendizaje, y que actúa cuando teorizamos, pensamos o ponderamos. El Aire regula el Este, porque esta es la dirección de mayor claridad, y la de sabiduría y conocimiento. Su color es el amarillo, el amarillo del Sol y del cielo al amanecer, y su estación es la primavera. El Aire gobierna la magia de los cuatro vientos, la mayoría de las adivinaciones, la concentración y la magia de visualización.

 

 


FUEGO (HERMANO)

 

El Fuego es el elemento del cambio, el deseo y la pasión. En cierto sentido, contiene en su interior todas las formas de magia, puesto que la magia es un proceso de cambio. La magia del Fuego puede ser aterradora. Los resultados se manifiestan rápida y espectacularmente. No es un elemento para el temeroso. Sin embargo, es el principal y por esta razón es muy usado. Este es el reino de la sexualidad y la pasión. No es sólo el fuego sagrado» del sexo, es también la chispa de divinidad que brilla dentro de nosotros y de todas las cosas vivas. Es al mismo tiempo el más físico y el más espiritual de los elementos. Sus rituales mágicos suelen involucrar energía, autoridad, sexo, curación, destrucción (de hábitos negativos, enfermedad), purificación, evolución, etcétera. Un ritual de Fuego suele involucrar ahumar o quemar una imagen, hierba, o cualquier otro objeto inflamable, o el use de velas o pequeñas hogueras. Su magia se practica normalmente junto a la chimenea, o junto a fuegos encendidos en espacios libres salvajes, o junto a la llama de una simple vela. El Fuego es masculino. Regula el Sur, el lugar de mayor calor, el color rojo y la estación del verano. Toda la magia de las velas se encuentra bajo los poderes del fuego.

 

 


AGUA (HERMANO)

 

El Agua es el elemento de la purificación, la mente subconsciente, el amor y las emociones. Así como es un fluido, constantemente cambiante, fluyendo de un nivel a otro, así también nuestras emociones están en un constante estado de flujo. El Agua es el elemento de absorción y germinación. El subconsciente está simbolizado por este elemento porque está girando, siempre moviéndose como el mar que no descansa ni de noche ni de día. La magia del Agua involucra placer, amistad, matrimonio, fertilidad, felicidad, curación, dormir, soñar, actos físicos, purificación, etcétera. Un ritual de agua suele finalizar arrojando o situando un objeto en agua. Este es un elemento femenino, y su color es el azul del agua profunda, profunda. Regula el Oeste y los meses del otoño, cuando los chaparrones lavan la Tierra. La magia del agua se realiza con espejos, el mar, la niebla y la lluvia. Estos son, pues, los cuatro elementos. Un estudio completo de ellos puede ocupar toda una vida, pero estas son las bases. Aunque no es necesario invocar estos elementos o trabajar con ellos directamente, es beneficioso ser consciente de ellos y recordarlos cuando se practique la magia.


 

 

 

“LOS CUATRO ACUERDOS”
(ENSAYO)



            Ha sido difícil, comenzar a escribir sobre el tema, la verdad es que, no se como podría etiquetar el libro, si talvez como un libro de superación personal o simplemente de vivencias compartidas, la verdad es que es material inspirador.

            Me ha parecido muy interesente y mientras seguía sus líneas me encontraba de pronto con parecidos muy precisos con otras obras especialmente “El Arte de Amar” de Erich Fromm, pero obviamente con su propio toque, el cual es por demás singular, ya que es mas digerible para el lector, pues además de usar ejemplos cotidianos para expresar sus situaciones, el autor se vale también de una serie de nombres llamativos para que uno como lector no olvide y tenga precisados ciertos puntos que toca variadas veces, durante la obra.


            Mi parte favorita de esta obra es sin duda alguna, la primera, cuando el Dr. Miguel Ruiz nos habla lo que a su manera concibe con la domesticación del ser humano, es algo que aunque ya percibías como el mismo autor lo menciona, talvez no lo habías comprendido o hasta cierto punto digerido por en su totalidad; justo cuando leía, como es que desde muy niños somos adiestrados, como entramos a este mundo lleno de acondicionamientos y como es que de alguna manera nuestra libertad se ve subyugada y hasta cierto punto robada o escondida frente a nuestros propios ojos, vino a mi mete aquel ejemplo que seguramente hemos escuchado y el cual toma lugar cuando en los primeros días de nuestra existencia, mas precisamente cuando ingresamos a la escuela se nos pide que dibujemos una flor, si una simple flor; entonces varios de nosotros comenzamos a pintar hermosos tallos amarillos con pétalos azules, los cuales tienen poco que ver con la realidad, pero que al final demuestran que son nuestra creación y por ende expresión de nuestro libre albedrío, y es en ese momento cuando más disfrutamos de nuestra linda flor que se aparece nuestra maestra y nos dice que estamos mal, que como puede ser una flor de esa forma y llevar esos colores y nos enseña una flor pálida de tallo verde y pétalos rojos (¿No es cierto?), que a nuestro gusto no es ni la mitad de bonita que lo es la nuestra, pero que como dice la maestra es como debe ser. Y es de esta forma, como nos vamos integrando a nuestro nuevo mundo.


            El autor dice que cuando aceptamos una situación de estas y convencemos a nuestra mente de ello estamos aceptando algo, estamos tomando un acuerdo y esta es la premisa que maneja a lo largo de su obra “los acuerdos”. Cabe mencionar que también da el nombre de Juez a esa parte disfuncional de nuestra conciencia o de nuestro ser, que siempre nos esta diciendo que estamos haciendo algo mal, algo que transgrede a las reglas y que tantas veces y con tanto odio Don Federico Nietzsche refiere en su obra el anticristo y que a nuestro ojos occidentales ha sido puesto como “el pecado”. Miguel Ruiz llama “Victima” a la parte de nosotros, que siempre sufre los embates, regaños y críticas del Juez, pero que a su vez se ha acostumbrado a este trato, formando una dependencia de estilo sádica hacia los malos tratos, pues estos le hacen recordar, o más bien creer que se lo merece por transgredir ciertas normas; y son estas normas, este conjunto de normas que aunque externas moldean nuestro comportamiento, ya que determinan nuestra aceptación y grado de afección en una sociedad.


            Ya dentro de la tónica empleada por el autor, es decir hablando de “acuerdos” el propone cuatro, para alcanzar, lo que poco se menciona directamente en la obra, pero que es la felicidad, y es que el habernos adaptado de una forma abrupta a esta sociedad, nos provoco traumas, que fueron creciendo por la necesidad de mas aceptación pero con la mayor carencia de aptitudes, para lograr entrar a un mundo lleno de estereotipos.


            Es menester hablar ahora a manera de bosquejo de cada uno de los cuatro acuerdos de los que el autor habla.

            Primer acuerdo, “Se impecable con tus palabras”; Mencionare que, es este mi acuerdo principal, ya que después de analizar un poco las letras del Doctor Miguel Ruiz, llego a la conclusión, que lo que en verdad nos quiere decir o hacer saber es la tremenda fuerza y poder que tienen las palabras, pues amigos míos el hablar no solo se reduce a un acto, es una liberación de energía la cual puede ir cargada de cierta manera ya sea negativa y positiva y afectar a quien la recibe, cuantos de nosotros al escuchar una buena pieza musical nos transportamos a diferentes lugares y esto a causa de que la música y los sonidos son energía.

            Así las cosas, el autor en este llamado acuerdo, hace hincapié en el poder de la palabra, pero mas que eso hace referencia a las consecuencias que puede esta causar debido a la forma o intención con que sea mencionada, pero mas importante aun la forma en que el receptor la tome; es decir es malo ofender, pero mas malo aún es el aceptar la ofensa y creerla es la materialización que su busco al ofender.

            Segundo Acuerdo, “No te tomes nada personalmente”; En realidad, como se podrá notar, este acuerdo es consecuencia directa del primero, partamos de nuestro ejemplo que toma a la ofensa para funcionar, al decirla uno desprende cierta energía, la cual de llegar a cumplir su cometido nos afectara y nos hundirá mas en nuestra ya difícil vida, pero si como lográramos como dice el autor: no tomárnoslos personalmente, esta ofensa solo pasar inadvertida sin afectarnos, y para lograrlo el autor hace una reflexión y nos menciona que el hecho negativo o la ofensa en si misma, proviene de una persona que sufre o fue acondicionada por no soportar o para rechazar la situación o a la persona que ofende. Es decir si alguien le ice a otro que es un tonto por decirle a una chica que la quiere o por abrazarla, tal vez en el hogar de aquel lo reprimieron en ese aspecto.


            Tercer Acuerdo, “No hagas suposiciones”; Hacer suposiciones, para mi no es malo, lo que es malo y concuerdo con el autor, es l hecho de creérselas, y es que este fue un punto muy bien abordado especialmente por la trascendencia que alcanza ya que nuestras suposiciones nos llevan a formarnos juicios falsos que a la larga terminaran por entristecer nuestra existencia, conduciéndonos a ahogarnos en un vaso de agua. Por ello la mejor solución es la comunicación y creo que en ese punto, todos estamos de acuerdo, no solo el autor. Este apartado también nos conduce a la objetividad, es decir a agotar todas alternativas hasta tomar una decisión madura.


            Cuarto Acuerdo, “Haz siempre lo máximo que puedas”; Me parece respetable la postura del autor al decir que es bueno siempre hacer lo máximo que podamos, pero no más, ni no menos. Y justifica su dicho, mencionando que si hacemos mal, nos sentiremos cansados y este agotara nuestro rendimiento y a largo tiempo nos frustra, y que si en cambio hacemos menos nos sentiremos culpables y el Juez como el lo llama, llegara mas rápidamente a impartir su juicio. La verdad yo me encuentro en discordancia con esta idea, puesto que yo siempre lo he sostenido: da mas del cien por ciento, nunca te detengas, nunca dejes nada para la vuelta, pues ese extra, es el que nos separa de la gente que no busca un trascender dentro de esta sociedad. Allí si que estamos en desacuerdo, obviamente el dar un extra no significa matarnos en una empresa que hagamos, solo es poner el ejemplo, es avanzar y ponernos otro limite, y así de esta manera, si antes me detenía en el 14 pues ahora lo hago en el 15, pues he ampliado mis rangos.

            En la parte final de la obra el autor, hace un enérgico llamado, para recuperar esa libertad que nos ha sido escondida, para reencontrarnos a nosotros mismo, para volver a ver a ese pequeño que nació sin miedo a nada y solo con curiosidad y con deseos de amar y de ser amado.

            Nos hace una exhortación a seguir sus cuatro acuerdos propuestos, nos dice que mejor es morir en batalla que el no pelear y esa es una de las partes que mas me agradan de esta obra, también afirma y concuerdo con el que la libertad mas que un premio es una elección y eso es una realidad, pide desterrar el mas grande obstáculo para la felicidad, el cual es el miedo y en su concepción nos menciona que cielo e infierno están aquí mismo y es nuestra elección salir o entrar al que queramos. El renunciar a nuestro viejos acuerdos y comenzar una vida nueva el lo llama una resurrección, pues regresamos de una muerte en la que estábamos y alcanzamos nuestro cielo personal.

            Como dije el libro me ha agradado, pues es de los que dejan cierta inspiración y eso es lo que diferencia a las obras literarias pues todas enseñan algo, ¿No es cierto? Por ultimo terminare con mi frase favorita de este libro:

“LA VERDAD NOS HACE LIBRES”